Los intendentes del conurbano suman otro golpe a las arcas municipales. Comenzaron a recibir las facturas de servicios con incrementos superiores al 260% aproximadamente.
“Les cuento que la factura de EDESUR del municipio pasó de 100 millones a 400 millones. Es decir, la que pagamos todos los quilmeños con las tasas. Para los que después hablan de impuestazos”, advirtió un funcionario de primera línea de la Municipalidad de Quilmes, que conduce la intendenta Mayra Mendoza.
El malestar no sólo es debido a los altos incrementos percibidos, sino también contra los críticos a la Gestión Mendoza, por las recategorizaciones en la Tasa SUM y la instauración de una nueva Tasa Vial para aquellos que carguen combustibles. Algo que fue acordado por numerosos jefes comunales de la Región.
Otro que se quejó por los tarifazos es el intendente de Florencio Varela, Andrés Watson, quien alertó que su municipio «se encuentra en situación crítica» debido a los incrementos percibidos en las últimas boletas de luz, gas y teléfono.
“A pesar del enorme recorte, continuamos con la realización de muchas obras públicas y elementos esenciales para los vecinos como remedios de enfermos crónicos, todo con recursos propios y de la provincia de Buenos Aires”, afirmó el varelense Watson en sus redes sociales.
El intendente de Esteban Echeverría, Fernando Gray, alertó que en el distrito que conduce llegó un incremento de 200 millones de pesos de un mes a otro, solo en lo relativo al alumbrado público.
«Un aumento de 277%. Objeté la factura en la Justicia, ¿cómo voy a convalidar que me cobren 200 millones más de luz?», dijo Gray, quien eliminó en su distrito la flamante Tasa Vial que comienza a ser cobrada en la Región.